Historias

Las 10 series de televisión imperdibles de 2019

Revista Don Juanenero 31 de 2019, 10:54 A.M.

HBO

George R. R. Martin, el escritor de los libros en los que se basa Game of Thrones, siempre les ha advertido a sus lectores y a los televidentes que no esperen un final feliz. “Esperen algo agridulce”, dijo en una conferencia en la Feria del Libro de Guadalajara en el 2016. “No puedes terminar una aventura y pretender que la vida es perfecta”.

Este año se lanzará la octava y última temporada de la serie. El ritmo lento que caracterizaba a los primeros episodios de cada temporada, pero que hacía que los últimos estuvieran llenos de sorpresas, quedó en el pasado: la séptima temporada fue un espectáculo tras otro, con episodios tan grandes y complacientes hacia los televidentes que parecían rayar en el fan service. Hubo batallas monumentales contra dragones, asaltos navales, alianzas impensadas entre los personajes favoritos del público para combatir a los caminantes blancos. Todo con una escena final que sugiere que la verdadera acción está por comentar. No por nada Vladimir Furdik, el actor que interpreta al Rey de la Noche, dijo: “Hay una batalla que los creadores pretenden que sea la más grande en la historia de la televisión”.

No todos son fanáticos de la serie, es cierto. Pero sin duda personajes como Tyrion Lannister, Daenerys Targaryen y Jon Snow –interpretados por Peter Dinklage, Emilia Clarke y Kit Harington– lograron convertirse en verdaderos íconos de la cultura popular. Y ahora, cuando el invierno finalmente ha llegado, es justo decir que Game of Thrones partió la historia de la televisión en dos.

BBC // AMAZON PRIME

El apocalipsis se avecina, un inconveniente bastante agudo para el ángel Azirafel (Michael Sheen) y el demonio Crowley (David Tennant), que se encariñaron con la Tierra y su vida rodeada de lujos, libros antiguos y buenas cenas. Por eso, la única opción viable para ellos es detener el fin del mundo.

Esta es la premisa de Good Omens, uno de los grandes estrenos entre las series de este año. Para entender por qué suena como una locura hay que saber que está basada en un libro de Terry Pratchett y Neil Gaiman; el primero, reconocido por su desquiciada saga Discworld –una historia en la que el mundo es plano y se apoya en cuatro elefantes que a su vez viajan sobre una tortuga que flota en el espacio–, y el segundo es el autor de historias como Coraline y American Gods.

Con los valores de producción de un blockbuster, la participación de dos de los mejores actores británicos de la actualidad, un elenco que incluye artistas como Jon Hamm y Frances McDormand, y la música de Queen, esta nueva serie de seis episodios promete ser un divertido viaje desde el principio hasta el fin de los tiempos.

HBO

Ni siquiera Colin Farrel pudo salvar la segunda temporada de True Detective. Pero ahora, para la tercera entrega, los guionistas decidieron volver a sus orígenes con una historia sencilla, evocadora y personal: un pueblo de Arkansas donde dos pequeños hermanos salen de su casa en bicicleta para nunca volver. Parece que los productores están dispuestos a corregir sus errores con una fotografía contemplativa que no se vuelve aburrida, con la mezcla del gótico sureño con los problemas sociales contemporáneos de racismo y pobreza, con un misterio que crea todo el suspenso necesario para ver inmediatamente el siguiente capítulo, y con un gran personaje de fondo: un detective afroamericano con problemas de memoria en tres etapas diferentes de su vida y su carrera, interpretado por Mahershala Ali. Ahí está el alma de True Detective: el balance entre la crueldad de los crímenes y la clase de personas que se requieren para afrontarlos.

NETFLIX

Se pueden contar con los dedos de una mano las buenas adaptaciones de videojuegos a la pantalla. Y claro, aunque hay que decir que The Witcher está basada en una serie de libros de un escritor polaco, fue en los videojuegos donde esta historia ganó popularidad.

Es normal sentirse un poco inquieto con esta nueva serie, aunque parece que los productores no escatimaron en gastos: el actor Henry Cavill interpretará a Geralt, un cazador de bestias en un continente plagado de criaturas mitológicas y seres mágicos, y la escritora Lauren Hissrich –que ya escribió episodios de Daredevil– prometió ocho capítulos cargados de acción “con monstruos incluidos”. Tal vez por fin Netflix encuentre la competencia –o el remplazo– que desde hace años busca para la legendaria Game of Thrones. Con The Witcher tienen una excelente base: una gran historia y una gran fanaticada.

HBO

Young Pope fue una blasfemia. El director, Paolo Sorrentino, dibujó un papa norteamericano que desayunaba Coca-Cola con sabor a cereza y que se rehusaba a ser un títere más de la Iglesia. Su idea no solo fue controversial, también fue la primera serie italiana en la historia que logró dos nominaciones a los premios Emmy.

Ahora, Sorrentino vuelve con una secuela, que en realidad es una nueva serie. Ya no será la historia ficticia de Pio XIII, aunque sí estará protagonizada por Jude Law y además contará con John Malkovich, uno de los actores estadounidenses más experimentados del momento.

HBO contribuyó con 40 millones de euros para la producción de la primera temporada de The New Pope y el rodaje comenzó en noviembre, en Italia. Y aunque no se conoce la fecha de estreno, muy seguramente las historias de Sorrentino volverán a lanzar dardos, a su manera, a la Iglesia, al Vaticano y al poder.

HBO

Hay que darles algo de crédito a Zack Snyder y a su criticada versión de Watchmen, que ya tiene 10 años de historia.

Terry Gilliam calificó a Watchmen como inadaptable. Y Alan Moore, el escritor original, dijo en una entrevista en el 2008 que “hay cosas en Watchmen que solo funcionan en los cómics”. Pero, pese a lo criticada que ha sido, hay que valorar la labor de Snyder de comprimir una de las historias más complejas del mundo de las novelas gráficas en una película de casi tres horas que por lo general trata el material original con reverencia: un mundo distópico en el que los superhéroes son tan humanos, inseguros, neuróticos, crueles e imperfectos como cualquiera.

Ahora, HBO y Damon Lindelof –escritor de Lost y The Leftovers– se volverán a arriesgar a hacer una nueva versión, pero tomaron la decisión de botar por la ventana la historia original de Moore y Gibbons. La serie de Watchmen que se estrenará este año tendrá una historia que se ubica dentro del universo de vigilantes perseguidos y decadencia social, pero no necesariamente será la que sucede en las páginas de la novela gráfica.

Es posible que la serie funcione como entretenimiento televisivo, pero que los amantes del cómic piensen que es un intento de sacarle dinero a la marca; o puede que incluya los suficientes guiños al cómic como para satisfacer a los fanáticos –lo cual parece imposible porque a los fans no los satisface nada– pero que no sea más que una serie mediocre. También –¿por qué no?– podría convertirse en una serie de culto, como Game of Thrones.

No importa el resultado. Aún sin saber quiénes serán los actores o cuál sea el argumento de la historia, esta es una de las series que más intriga en 2019.

HBO

No solo es una serie sobre varios adolescentes que intentan encontrarse a sí mismos a través de las drogas, el sexo, el alcohol y las redes sociales. También es el debut de Drake –la superestrella de la música anglo– como productor ejecutivo.

Euphoria está basada en un programa de televisión israelí del 2012. Sin embargo, HBO lo rescató para adaptarlo al público de Estados Unidos. Además, los toques de Drake empezaron a verse desde el primer momento: la serie será protagonizada por Zendaya, una cantante de 22 años que está conquistando listas musicales en todo el mundo.

Francisca Orsi, vicepresidenta de HBO, comparó la producción de esta serie con Trainspotting y algunos de los directores y escritores de la versión original colaboraron con la nueva adaptación. Solo falta ver si la banda sonora tendrá el sello único del rapero canadiense.

NETFLIX

Muchos aseguran que Los Simpson es la única serie que supera a Black Mirror cuando se trata de predecir el futuro. Es difícil comprobar esa afirmación, pero lo que sí es cierto es que la ciencia ficción, el componente psicológico, el suspenso y la ironía que Black Mirror ha integrado en sus cuatro temporadas son el enganche perfecto para crear un público que no ha hecho más que crecer durante los últimos cuatro años.

Netflix retrasó un par de meses la quinta temporada de Black Mirror por el lanzamiento de la película interactiva Bandersnatch. Sin embargo, fue una estrategia ideal pues cada capítulo promete volver con ese tono oscuro y sombrío que retrata las distopías tecnológicas de nuestro tiempo.

NETFLIX

La primera temporada de The End of the F***ing World fue un éxito. La historia de James y Alyssa, un adolescente psicópata y una joven desadaptada que deciden escapar juntos de sus casas y de su vida cotidiana, tuvo mucho más éxito del que se esperaba. Y por eso, este año Netflix estrenará la segunda temporada de la serie británica, que está basada además en la novela gráfica de Charles Forsman.

Los fanáticos, sin embargo, no están muy emocionados. The End of The F***ing World no había dejado cabos sueltos; además, el tratamiento de la violencia, el constante suspenso y una muy buena curaduría para la musicalización –casi toda hecha con grupos indie– hacen que la primera temporada sea difícil de superar. Todo un reto para Jonathan Entwistle y Lucy Tcherniak, los directores de la serie.

CBS

En los años sesenta, la televisión se emitía en blanco y negro, y las telenovelas eran historias de ciencia ficción. Durante cinco años, The Twilight Zone mezcló fantasía y terror en 156 episodios que escribía y narraba Rod Serling.

Su éxito sobrevivió a varias generaciones. Ya se habían hecho dos remakes de la historia para televisión –en 1985 y el 2002– y otros dos para cine. Pero no era suficiente: para celebrar los sesenta años del estreno original, Bryan Singer –un director, productor y guionista que ha trabajado en X-Men, Bohemian Raphsody y Superman Returns– le propuso a CBS rescatar una vez más la historia.

Poco se sabe de este homenaje a uno de los grandes clásicos estadounidenses: apenas los nombres de algunos actores invitados y que la producción empezó en octubre del año pasado en las montañas de Vancouver, en Canadá.

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