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Cultura

Star Wars: el despertar de la fuerza, la película más esperada del año

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Foto:

Revista Don Juan
No creo que me equivoque al decir que Star Wars: El Despertar de la Fuerza es la película más esperada del año. Con Disney apostándole a un amplio futuro de la franquicia, J. J. Abrams tiene una tarea monumental en despertar el amor de la gente por esta serie.
 En las secciones de comentarios de páginas de cine, en los foros de internet y en las conversaciones de mesa de los fanáticos de la serie, se discutió durante los últimos dos años una pregunta: ¿Cómo se puede volver a hacer Star Wars buena de nuevo? J. J. Abrams tuvo la difícil tarea de responder a esta pregunta y sus resultados se verán en menos de un mes. En mi opinión, estas son las pautas para hacer una buena película de Star Wars, y lo que debería tener la próxima, El Despertar de la Fuerza:
Keep it simple: en la primera escena de la primera película, en cuanto entraba Darth Vader se sabía que ese era el malo. No importaba qué quería, cuál era su plan, sólo era el malo. Así de fácil era la narrativa de Star Wars, una simplicidad que se perdió en las precuelas con sus tramas demasiado complicadas, con complots de asesinato y audiencias del senado. A veces no importa el plan –¿qué es lo que iba a hacer el Imperio con la Estrella de la Muerte? Ni idea–. Se trata de la lucha del bien contra el mal. 
 
 El equilibrio entre los efectos: las películas originales contaban principalmente con efectos prácticos, realistas, pero a veces restrictivos. Las precuelas usaron efectos visuales muy elaborados, pero en ocasiones eran demasiado. Lo que hay que buscar es un equilibrio entre lo práctico de las primeras, como los vestuarios de los alienígenas y las naves a escala, y los visuales de las últimas, la clase de efectos que nos brindan a Yoda peleando.
Sucede en tierras salvajes: como dicen Prescott Harvey y Robert Pérez en su carta abierta para Abrams, “Star Wars no pasa en la ciudad”. Además de Ciudad Nube, ¿recuerdan alguna metrópolis en la trilogía original? Eran puertos y bases escondidas llenas de rebeldes, mafiosos y contrabandistas. Es ese sentimiento de encontrarnos en una tierra peligrosa y sin leyes (la misma que tienen los wéstern que inspiraron a George Lucas) lo que nos cautiva e invita a conocer más sobre esta galaxia.
La magia de la fuerza: una de las mayores decepciones de La Amenaza Fantasma fue descubrir que la Fuerza, esa energía que “une a toda la galaxia”, como dijo el viejo Ben Kenobi, no es más que un montón de partículas en el aíre llamadas midiclorianos (o midiclorias). Parte del misticismo muere cuando se ofrece una explicación científica, especialmente porque este poder no solo asombra a los espectadores, sino a los mismos personajes. Hay que traer esa sensación de asombro de vuelta.
No digo que las precuelas sean malas. En varios aspectos son mejores que las originales: los escenarios son mucho más elaborados, lo que le da vida a cada planeta; las batallas se sienten grandes y relevantes, con escenas de acción que nos tienen al borde del asiento. Incluso La Amenaza Fantasma, con lo tonta que puede ser, tiene la mejor pelea con sables de luz en la serie, con una coreografía precisa y un trabajo de cámara que no la arruina con cortes y primeros planos innecesarios. Esto lo necesitamos, especialmente las nuevas audiencias. Por lo que sabemos de los tráileres y las teorías que los fanáticos publican en internet, Abrams hizo un buen trabajo. Puede que su película cumpla todas las expectativas, y que lo haga sin seguir ninguna de mis indicaciones. No importa. A la final, soy sólo un fan. En el fondo, la única sensación que queremos todos al ver Star Wars es la de asombro. Ver planetas de condiciones extremas, conocer héroes carismáticos y villanos temibles, especular sobre eventos y lugares que apenas se mencionan. Quiero sentir que todo esto pudo haber existido, hace mucho tiempo, en una galaxia muy muy lejana…
Ficha técnica:
Director: J. J. Abrams
Guion: Lawrence Kasdan, J. J. Abrams, Michael Arndt
Reparto: John Boyega, Daisy Ridley, Oscar Isaac, Adam Driver, Harrison Ford, Mark Hamil, Carrie Fisher
Fecha de estreno: 17 de diciembre de 2015
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